Tal vez las relaciones laborales en el trabajo sean para muchas personas una cuestión menor, pero el tener unos buenos compañeros y adecuado jefe puede ser decisivo para ayudar a sentirse bien personalmente, desarrollarse profesionalmente y promover el ser más feliz.
En los ambientes laborales positivos surge la motivación, la cooperación y la productividad, el compromiso, la creatividad, posibilitando el logro de los objetivos empresariales.
Las buenas actitudes y las emociones son contagiosas al igual que las negativas, las neuronas espejo tiene mucho que ver en ello, puesto que podemos sentir emociones de otros como propias. En este sentido, podemos hablar de las personas vitamina y las personas tóxicas. La primeras son aquellas que nos hacen sentir bien, son respetuosas, fomentan lo mejor en los otros, colaboradoras, muestran empatía, saben escuchar, tienen buen humor, unen al equipo y tiene una visión positiva de la vida. Las personas toxicas, por el contrario, nos afectan negativamente, puesto que se pueden mostrar continuamente quejicas, envidiosas, mandonas, culpando a los demás de los errores, con escasa o nula autocritica y siendo demoledoras con la autoestima de los otros.
Mientras que convivir con personas vitamina es sencillo y gratificante, neutralizar las actuaciones de las personas toxicas es una labor necesaria para el bien común que podemos desarrollar siguiendo estas pequeñas pautas:
-
No intentes cambiarlos, no puedes desgastarte en eso.
-
Limita tu interacción, de manera correcta, a lo estrictamente laboral, no dejes que te afecte su comportamiento. El problema lo tiene el otro no tú.
-
Hazte respetar y pon límites de manera asertiva a su comportamiento. Nadie te debe faltar al respeto ni siquiera tu jefe.
-
Práctica el humor, con humor se lleva todo mejor y se relativiza.
-
Apóyate en las personas que te aprecian y aportan, tanto dentro del trabajo como fuera. Encuentra tu persona o personas vitamina.
-
Si eres el jefe y detectas personas tóxicas en tu equipo, sería conveniente ser poco tolerante ante las personas con esas actitudes y comportamientos, ya que son potencialmente generadoras de conflictos. Siempre que puedas fomenta en el grupo conductas propias de las personas vitamina.
Esperamos que os sirvan de ayuda y consigáis relacionaros de forma positiva y productiva. ¡A relacionarse!